Muy jóvenes y desde luego muy ocultos

Estoy viendo en la Sexta 3 el film de 1987 dirigida por Joel Schumacher y producida por Richard Donner, Jóvenes Ocultos. Protagonizado por Kieffer Sutherland, Jason Patric, Jami Gertz y los dos Corey (Haim y Feldman) además de la presencia de la siempre correcta Dianne Wiest. Y lo más destacable, lo mejor con diferencia es la banda sonora con la magnífica People are Strange, de The Doors con poster de Jim Morrison en la cueva de los vampiros incluido.

Es un film de vampiros que salen de noche y no brillan a la luz del sol, aunque sí se reflejan en los espejos (si no , cómo peinarse tan bien y de acuerdo a la más estricta estética de los ochenta?) y también comen ajo (en poca cantidad, eso sí...pero eso nos pasa a todos, no?).La trama es la habitual en este tipo de historias. Una família desestructurada que cambia de ciudad y los hijos adolescentes se meten en varios lios ya sea con pandas callejeras, judocas macarrillas buscalios o vampiros. Los padres (la madre, en este caso) son los últimos en enterarse de los problemas de los hijos y el personaje más despistado (normalmente alcohólico o drogadicto) es el que, en el fondo, se entera de todo. Y, por supuesto, un final feliz lo suficientemente abierto como para tener las previsibles secuelas.

Cuando la vi de adolescente, me enamoré de Jason Patric (Michael), siempre me han gustado los morenos, aunque me fascinó la dureza de Kieffer Sutherland (David). Cuenta con el triángulo amoroso indispensable con la dulce Estrella (Jami Gertz) metida en este lio por proteger a su hermanita.

"No tienes que cogerme, Michael, sólo seguirme", y Michael le siguió.

Algo paralelo sucede con el hermano de Michael, Corey Haim, que junto a los hermanos Frogg, serán quienes sacaran del embrollo a Michael. Los hermanos cazadores de vampiros son esos personajes graciosos que ofrecen ese toque de humor indispensable para que un film demasiado cercano a las películas de serie B (con todos mis respetos a Joel Schumacher, claro) y que, al mismo tiempo, son un sincero homenaje a unos de los genios del terror, a Edgar Allan Poe. Los hermanos Frogg se llaman Edgar y Alan.

Aunque Jóvenes Ocultos no es una obra de arte, es una película que, ahora que están de moda los vampiros moña, dulces y románticos, muestra la verdadera cara de un vampiro. Los vampiros deben ser duros, malos, crueles y egoistas.